Si hablamos de que se acaban las vacaciones y sentimos ansiedad, fatiga, depresión, tristeza, es porque podríamos estar teniendo síndrome postvacacional. ¿Quieres saber qué es?
Esta puede ser la frase de muchos de nosotros al regreso de vacaciones. Es lo que se conoce como el síndrome o depresión postvacacional. Si bien actualmente no está incorporado en los manuales de estudio de psicología, muchos especialistas asumen que cuando se acaban las vacaciones es muy común tener una serie de síntomas que nos hacen dudar sobre cómo enfrentar el primer día de trabajo.
Se acaban las vacaciones: síntomas del síndrome
El síndrome postvacacional produce sensación de tristeza, apatía, falta de energía y motivación sobre cómo enfrentar el primer día de trabajo o rutina diaria tras el regreso de vacaciones. El hecho de que se acaban las vacaciones también puede generar decaimiento, apatía y/o ansiedad. Una sintomatología muy similar a un cuadro de estrés, según detalla un informe realizado por Adecco España, consultora líder en el sector de los recursos humanos.
Este informe además declara que 1 de cada 3 trabajadores en España actualmente sufre o sufrirá el síndrome postvacacional al volver al trabajo. Si bien el estudio pertenece a otro país, estas cifras pueden ser similares a los países en donde el receso de vacaciones se da en largos períodos durante el verano.
El síndrome pueden padecerlo tanto adultos como niños, aunque es menos frecuente en estos últimos porque suelen vivir el regreso de vacaciones como una experiencia positiva salvo que pudieran estar viviendo algún tipo de acoso o bullying. En el caso de los adultos cuando se acaban las vacaciones comienza la readaptación a la vida laboral, es decir cambios de horarios y aumento de obligaciones. Todo esto conforma un proceso, que en algunos casos es más intenso y produce en quien los sufre malestar psicológico y/o físico.
Se acaban las vacaciones: cómo recuperarse del síndrome
Aquellos que al regreso de vacaciones presentan los casos más leves se sentirán de esta manera por 2 o 3 días. Sin embargo, los síntomas pueden durar hasta 2 semanas. Pueden combatirse levantándose un poco más temprano de lo habitual, retomando el trabajo de forma gradual y adoptando una actitud positiva.
Casos más complejos podrían necesitar una consulta médica, pero deberían ser muy pocos ya que este síndrome puede prevenirse.
Se acaban las vacaciones: cómo prevenir el síndrome
La depresión postvacacional se puede prevenir a través de distintas formas:
- Respetar algún tipo de horario nos permitirá seguir un ritmo, relacionado con nuestro reloj interno que nos permita volver a cumplir con los tiempos que nuestro trabajo implique.
- Intentar un regreso de vacaciones progresivo. Volver a la rutina puede favorecer que ese cambio no resulte tan dramático cuando se acaban las vacaciones, por ello es preferible no volver del lugar de vacaciones el día anterior a la vuelta al trabajo.
- Si es posible, dividir el periodo vacacional en varias partes, para no estar todo el año pensando en las vacaciones.
- Y con respecto a cómo enfrentar el primer día de trabajo, es conveniente ordenar el lugar evitando las montañas de papeles. Hacer el esfuerzo de organizar la agenda, estableciendo un plan para afrontar las tareas pendientes con un orden de prioridades.
Si aún te quedan unos días piensa muy bien qué hacer el último día de vacaciones, pero no dejes de lado descansar y comer saludablemente para tener un óptimo comienzo. Si todavía no te tomas tu tan deseado descanso, recuerda cotizar tu seguro de viajes y vete con una buena cobertura en caso que los síntomas te tomen desprevenido antes del regreso de vacaciones.
Fuente: Clínica Universidad de Navarra